Así estuvo el concierto de Mónica Naranjo en la Arena Monterrey.
Diva e icónica como siempre, Mónica Naranjo nos dejó boquiabiertos con su potente voz, belleza y hermosos vestuarios durante su concierto en la Arena Monterrey.
Mónica Naranjo cerrará su gira “Mimétika” en la Ciudad de México el próximo 26 de enero, no sin antes haber hecho su ya obligada parada en Monterrey y sus fans la recibieron con los brazos abiertos.
Con una gran producción audiovisual, talentosos músicos, cantantes y bailarines, la cantante española, salió al escenario a las 9:30 de la noche, luciendo un hermoso vestuario rojo para llevarnos en un recorrido musical a través de sus más grandes éxitos y recientes producciones.
“Europa” y “Desátame” fueron los temas con los que se dio inicio a lo que ella misma llamó, una noche de fiesta.
“Buenas noches Monterrey, hacia tiempo que no nos veíamos, bienvenidos a mi casa que se llama mimétika”, así fue como Mónica Naranjo dio la bienvenida a todos sus fans.
Posteriormente realizó el primer cambio de vestuario, momento en el que recordó su primera presentación en México, la cuál fue en el famoso programa “Siempre en Domingo”, así interpretó virtuosamente “Sola”, momento muy emotivo gracias a la atmósfera creada por el piano.
Naranjo tuvo una gran interacción con su público. Carismática y agradecida, platicó con sus fans, incluso dedicó la canción “Hoy No” a uno de sus fans, quien dijo haber estudiado canto tras ser inspirado por ella.
Para el segundo cambio de vestuario lució un hermoso traje negro, brillante como ella. Pero sin duda, nada brilló tanto como su vibrante voz.
Canciones como “El Amor Coloca” y “Sobreviviré” hicieron bailar y cantar al público para seguir disfrutando la noche.
La cantante y compositora realizó un último cambio de vestuario, y estuvo aún mas en cercanía a su público al sentarse frente al escenario para cantarnos “Óyeme”.
Tras una hora y media Mónica Naranjo se despidió de su público cantando “Las Campanas del Amor” y “Empiezo a Recordarte” y aunque el público no dejaba de gritar por una canción más, Mónica se despidió de Monterrey con besos y agradecimiento por tanto cariño de sus fans.
